Páginas

lunes, 26 de septiembre de 2011

El aguila calimochera y otros falconiformes de compañia.

Suenan los timbales de la inmortal composicion de Anton Garcia Abril. Silencio en el salon. El mas pequeño, sentado sobre la alfombra frente al televisor, se termina la cuajada con miel. Golpea repetidamente el interior del vaso de cristal con la cuchara.


TELEVISION ESPAÑOLA
presenta

EL HOMBRE Y LA TIERRA

Guion, comentario
y direccion de la serie:
SAMUEL RODRIGUEZ
DE LA FUENTE

Musica compuesta
y dirigida por
ANTON GARCIA ABRIL

Director realizador
BORJA MORO

EL AGUILA CALIMOCHERA
Y OTROS FALCONIFORMES DE COMPAÑIA


...[Prodigiosa panoramica fija, arrozales totalmente inundados son atravesados por un ceñido camino de tierra, el autobus aparece en la parte derecha de la pantalla y desaparece por el lado izquierdo direccion oeste]...

Durante los ultimos dias del mes de Octubre habiamos viajado por la comoda orilla del lago Tonle Sap. Atras quedaron las ruinas del templo de Bayon en Siem Reap. Por la mañana y despues de esperar las acostumbradas dos horas, antes de la llegada del transporte, partimos direccion Battambang. El monzon sigue sacudiendo el presente.

...[Travelling avant siguiendo al conductor mientras trota, grita y aporrea cristales]... 

A pocos metros de la entrada de la parada de la compañia Paramount Express se puede disfrutar de la vivida danza del maquinista de Tuktuk, palabra aborigen, que alude, no sin sorna, al carruaje privado compuesto por una moto ruinosa y su inseparable remolque destartalado de tubos metalicos como estructura y lonas de plastico como epidermis. Estos bellos correteos, golpeando incansablemente los vidrios de los vehiculos, con pequeños saltitos, tratando de captar turistas, son la perfecta bienvenida para el aventurado que trata de poner el pie en el reino de Cambuya. La perfecta ejecucion en los movimientos y el exquisito plumaje mostrado por el falconiforme accipitrido de compañia solo es superable en belleza al del abejaruco, o Merops apiaster para los hombres de ciencia, del que tantas veces hemos hablado.

Descendemos en calma del autobus siempre sin mediar verbo, ya que cualquier atisbo de duda significaria una agonica muerte a manos del rapaz de compañia pretendiendo su contratacion. Amablamente tiradas en el suelo por los operarios de la compañia quedan nuestras abultadas pertenencias. Las recogemos con improbo esfuerzo, y dirigimos la marcha hacia nuestra morada [reservada por internet] siempre evitando la mirada directa hacia el conductor que espera avido, impaciente, algun indicio de flaqueza mental para originar cualquier tipo de dialogo que conlleve un intercambio economico.

...[Plano subjetivo objetivo, Samuel Rodriguez enseña en su cuaderno de notas de campo las fantasticas acuarelas del colaborador Juan Varela Simo, de los diferentes subordenes de las rapaces cambuyanas]...

A las puertas del hotel se desparraman casi todos los parientes de la familia. Observamos en la acera el clasico tuktuk, detras, escondido, el tuktuk motocicleta para un solo pasajero [la opcion mas economica], disfrutamos del aerodinamico perfil del cada vez mas popular tuktuk sidecar y oimos pasar titubeante al tuktuk minivan, con, quizas, nueve o diez cautivos. A nuestras mentes llegan las imagenes matinales, en el camino, de la clasica mula mecanica con remolque de madera de dos ruedas y el hermano mayor, el camion tuktuk, que por no llevar cubierta, convierte cada paseo monzonico, en una verdadera ruleta rusa.

El conductor de tuktuk relajado y conocedor del terreno en que anida, siempre conchabado con el dueño del hotel, hostel, guesthouse o alojamiento solicitado, guiara al infeliz turista hasta su habitacion para tratar de arrancar informacion al respecto de sus futuros movimientos, planes, intereses, deseos, anhelos. No aprecia las tres dimensiones, ni reconoce los colores. La rapaz solo ve un billete plano que se mueve y balbucea palabras de las que solo conoce el significado en kilometros que convierte con disparatadas formulas en dolares.

...[Grafico demostrativo]...

En epocas ancestrales el accipitrido de compañia debia ocupar la cuspide de una piramide ecologica perfectamente equilibrada en su base, conocida por los ecologos con el nombre de estrato de los productores. Agricultores, ganaderos, pescadores, kmeres en general y algunos moradores de regiones vecinas debian proporcionar adecuado alimento a los fitofagos salvajes, hoteles y restaurantes. Estos, lo cedian a los predadores, barcas y otros transportes acuaticos, a los superpredadores, autobuses y medios de transporte terrestres, y a los necrofagos [ciertos catartidos tuktukianos]. Pero el turista neonlitico ocasiono drasticos cambios en la comunidad zoologica primitiva; sustituyo los fitofagos salvajes por ganaderia domestica [alojamientos de batalla] y elimino practicamente a los predadores y superpredadores. Tanto el accipitrido como el pandionido pasaron a depender exclusivamente del turista [y algun ocasional portamochila], pero mas tarde la maquinaria [guesthouses y hostels] sustituye a las bestias de labor y la ganaderia se estabula. El medio cambia dramaticamente, el piloto de tuktuk esta abocado a la muerte por hambre, salvo en unos pocos lugares donde persisten patrimonios heredados, donde quedan ruinas, templos, paisajes naturales y todo tipo de actividades para el descanso y disfrute del visitante, donde el voraz ave de compañia depende nuevamente de un superdepredador, en este caso, el joveno mochilero.

La similitud entre las rapaces diurnas, falconiformes, y las nocturnas, estrigiformes, capaces de ofrecerte cualquier tipo de sustancia opiacea o de laboratorio a cualquier intempestiva hora ademas de un paseo, se origina a traves de la denominada convergencia evolutiva, animales filogeneticamente distantes ecoevolucionan de forma similar por tener la misma alimentacion y ocupar un espacio comun dentro de un ecoecosistema.

...[Travelling retro del macho Alfa tumbado en una hamaca verde y amarilla fijada dentro del remolque de una maquina infernal azul]...

Recreemonos contemplando la audacia en los pasos de este magnifico ejemplar adulto al inicio de la escalinata que llega hasta el templo de Phnom Banan. Que riqueza en la coreografia. Que osadia en la accion. Eso si, sin exagerar los divertimentos, como gustaba a Noverre.

...[Fundido en negro]...

No hay comentarios:

Publicar un comentario